NOTICIAS DE KA

No he hecho sino publicar la última entrada, cuando recibo un email inesperado de Ka (inesperado porque hace más de siete años que no tenía noticias de él). Dice así: "Cuando la piraña transparente del llanto muerde los ojos, o la risa hace en los labios su hormiguero, el mundo se oscurece, la eternidad se ilumina". Nada más. Naturalmente, he intentado responderle al momento, sólo para ser informado de que la dirección de correo electrónico a la que estaba intentando escribir no existía; cosa que, por otro lado, no me ha sorprendido en absoluto.

Tal vez sea conveniente que os hable un poco de Ka, ya que el objetivo declarado de estas páginas es ofrecer al mundo una cartografía precisa de mi corazón secreto, sin mentiras -de arrojar mi corazón al mundo con el mismo gesto indiferente y delicado con el que una duquesa arrojaría un diamante a los puercos (la frase no es mía, es de Ka). Y Ka ha sido, es y será siempre alguien muy importante en una porción de mi vida de la cual los que me conocen apenas tienen noticias; no exagero si digo que Ka es para mí más que un hijo. Sé que está leyendo esto, pero es cierto. Y él lo sabe. En cuanto a vosotros, me trae sin cuidado si os decidís a creer o no todo lo que poco a poco os iré contando; la verdad conoce caminos que la razón ignora, lo cual es doblemente cierto en quien, como yo, ha nacido homérico y por tanto obligado a llevar una doble vida para sobrevivir en esta triste y patética snuff movie en la que los hombres se han empeñado en convertir la existencia. Os hablaré, pues, de Ka, y no sólo de Ka, sino también de los otros; pero eso será mañana. Ahora no tengo tiempo, he de dar de comer a los animales.